Hace algunos meses escribí en mi newsletter una nota sobre mi experiencia usando el Chat GPT. De hecho, saqué la nota las primeras semanas en que su uso estuvo sonando en redes y medios. Desde entonces, he tenido sentimientos encontrados por el uso de Inteligencia Artificial (IA)… Porque, aunque si bien, sigo sin recomendar escribir usando exclusivamente la IA (incluso en sus versiones más caras), lo que sí debo decir es que tampoco hay que satanizarla.
La transformación digital es necesaria…
He trabajado en diferentes industrias donde la digitalización es parte del proceso. Es decir, o adoptas la transformación digital o te quedas pasos atrás de tu competencia. Ahora bien, y esto es algo que he aprendido de una de las empresas pioneras en consultoría de transformación digital (Y sí, me refiero a Digital Bricks para la cual trabajo): no es adoptar por adoptar; sino utilizar las herramientas que brinda la tecnología para optimizar tus procesos y mejorar los resultados.
No todos están preparados para entender que la tecnología es un aliado estratégico y no una amenaza. Pero, así como existe este extremo, también me he encontrado con otros que piensan que la tecnología puede reemplazar el trabajo humano.
Historytime: cuando quisieron reemplazarme por el CHAT GPT
Cuando se lanzó la versión de paga de CHAT GPT una de las cuentas más grandes que yo manejaba (como especialista en redacción SEO), me redujo la carga de entregables de un momento a otro; luego me enteré de que era porque estaban usando la versión de paga del chat para crear parte de las notas que antes me eran asignadas. De esa manera “se ahorraban” mi pago y le pagaban solo $20 a la herramienta por hacer cuantos textos quisieran.
¿Qué pasó con los textos hechos con IA que hizo este cliente por su cuenta?
Pues que tuvo que aprender por la mala que el uso de una herramienta, cuando no se es especialista, no sirve de nada. En consecuencia, luego me vi con varios archivos que debía “corregir” porque su cliente (el cliente de mi cliente) los había rebotado. ¿Por qué? Porque simplemente, quienes encargaban a la IA la redacción le decían a la herramienta que escribiera un texto sobre un tema X, de tantas palabras, y el trabajo estaba “terminado”.
Obviamente, como muchos redactores SEO, y especialistas SEO sabemos, el rebote del cliente y de los bots se veía venir. Eso sin mencionar la experiencia del usuario, para aquellos textos que se llegaban a publicar. Los cuales, al ser genéricos o con información repetitiva no eran realmente útiles. En consecuencia, afectaba métricas clave como la tasa de rebote o de salida; así como también las impresiones y clics que alcanzaban estas publicaciones por una mala ejecución y trabajo en el texto.
¿Por qué no recomiendo usar la IA para escribir?
En base a mi experiencia corrigiendo textos hechos por mis clientes con IA; o por la mía propia probando la plataforma, estos son algunos motivos por los que no recomiendo la redacción exclusiva con IA.
- El contenido es muy genérico e impreciso. Requiere más tiempo verificar la información que proporciona en comparación con investigar y redactar por cuenta propia.
- La calidad de redacción de la IA aún deja mucho que desear. Es fácil sacar al ojo un texto escrito por IA, ya que tiene “muletillas”, es decir palabras que siempre va a usar en un texto hecho por ella.
- Siempre usa resúmenes como párrafo de cierre.
- Incluso con los prompt más costosos, no logra captar al 100% la identidad de la marca.
- No sirve para escribir textos especializados; ya que como todo redactor profesional sabe, estos hay que hacerlos a partir de fuentes confiables, muchas veces de repositorios académicos. Además, toman tiempo, revisión, criterio y habilidad.
Podría enumerar varios más; pero te dejo el espacio para que sigas con la lista en los comentarios.
Entonces ¿sí es malo usar la IA para escribir?
Como dije al inicio, aunque no lo parezca por el apartado anterior, no está mal usar herramientas para mejorar tu proceso. La digitalización es parte del crecimiento en cualquier industria. Lo que sí está mal es creer que la herramienta lo hará todo por su cuenta. En ese sentido ¿cómo recomiendo usar tecnología como chat GPT, Gemini o similares, para redactores?
Para romper tu bloqueo
Todos los que nos dedicamos a escribir sabemos que a veces escribimos tanto que nos bloqueamos y no sabemos cómo enfocar un texto. Una conversación con la IA puede ayudarte a focalizar y saber por qué lado alinear el texto que luego tú escribirás.
Como corrector de estilo
Esto es algo para lo que la IA sí me ha servido. Y explico por qué. En digital uno debe escribir para ayer. Esto hace que escribamos rápido y se nos puedan pasar errores de tipeo, puntuación, entre otros que, aunque “menores”, afectan la legibilidad. El uso de IA como corrector de estilo de textos breves es útil, ya que de esa manera reducimos el porcentaje de error que puede tener un texto escrito rápido por un redactor profesional.
Para aclarar algo que leíste
A veces, cuando buscamos información para redactar un texto especializado, algunos términos suelen ser muy técnicos o complicados. Esto hace que nos tome más tiempo procesar la información para empezar a redactar nuestros textos propios. En este escenario la IA me ha servido para poder entender estos textos complejos, procesarlos y utilizarlos luego como fuente de información.
Generalmente, lo que hago cuando uso esta funcionalidad, es pedirle a la IA que me explique el párrafo que no termino de entender. O simplemente le digo: “tradúcelo para una persona que no es especialista en el tema”, y suele darme una versión más fácil de digerir.
¿Qué opinas? Seguimos satanizando a la IA o la usamos como una herramienta para mejorar nuestros procesos. Me voy por lo segundo; sin embargo, es cuestión de aprender que la tecnología en general es una herramienta, no un reemplazo, y bien usada, puede ofrecer varias ventajas en nuestro día a día. Cuéntame en los comentarios tu experiencia con la IA.
Gracias Wendy. Me gusta tu blog!